Cuando contamos con un cristal arañado en una vivienda puede resultarnos más o menos anti-estético, pero la funcionalidad continúa siendo la misma. Sin embargo si hablamos del cristal de un coche la cosa cambia. Si la luna de nuestro vehículo cuenta con arañazos superficiales que no afectan a su integridad probablemente no tengamos que sustituirla, pero dado que es posible pulir cristal es conveniente solucionar esta situación por nuestra propia seguridad. Y es que los arañazos en los cristales no sólo dificultan la visibilidad sino que también pueden producirnos reflejos que nos puedan llevar incluso a perder el control del coche al ser deslumbrados en momentos de incidencia solar. Para ello podemos contactar con una empresa de trabajos verticales.
Por tanto el hecho de pensar en pulir cristal no implica solamente solventar un problema antiestético sino que si se trata de un coche podemos verlo como una medida para mejorar la seguridad del mismo. Para realizar el pulido es necesario contar con un par de herramientas como puede ser un taladro manual o bien con una lija que fijaremos a un taco de madera para poder manejarla con más facilidad. Podemos realizar el pulido con todo tipo de cristales, no sólo las lunas del vehículo, y lo mejor es utilizar una lija al agua de grano medio, pasando posteriormente a una de grano fino y complementando el proceso con pasta de pulir. En el caso de utilizar un taladro podremos utilizar también un cilindro de esmeril para dar un buen acabado al cristal. Y para finalizar el trabajo de pulir cristal se requiere sobre todo un buen lavado del vidrio una vez finalizado el mismo ya que durante el proceso del pulido pueden quedar adheridos al cristal restos de polvo. Es por esto por lo que para realizar la tarea será imprescindible que nos protejamos con una mascarilla anti-polvo para que no aspiremos ninguna partícula de cristal. Para ello podemos contactar con una empresa de rehabilitación de fachadas.
Pero no sólo los coches pueden necesitar que sus cristales sean pulidos, otro elemento en el que también las rayaduras pueden interferir en su uso es el reloj. Con el paso del tiempo los cristales de los relojes acaban rayándose pero es posible eliminar estos desperfectos y dejarlos como nuevos con un disco de fieltro para el taladro y utilizando también óxido de cerio y agua. Utilizando la velocidad baja del taladro para evitar que salpique y protegiéndonos siempre para no aspirar el polvo que se desprende al pulir, podremos conseguir en tan sólo 10 minutos que nuestro reloj luzca como nuevo sin las grietas o rayas que lo afeaban y dificultaban la visión.
Recuerda. Para las ventanas del hogar y otras superficies de vidrio se pueden rayar y quedar feas con el tiempo. En lugar de incurrir en el gasto de reemplazar el vidrio, puedes pulir las rayas leves o delgadas.